ORACIÓN AL JUSTO JUEZ
¡Oh divino y Justo Juez que extiendes tu mano a pobres y ricos!, amante eterno del perdón y de la caridad, luz espiritual que alumbra los caminos más oscuros, palabra de vida y de amor profundo, enseñanza y testimonio que nos alimenta con la oración.
Tú que padeciste los maltratos y humillaciones más terribles, que siendo Santo y puro aceptaste con humildad los peores castigos, tú que siendo el rey de reyes, el que vive y reina sobre todo mal y toda la humanidad, acogiste sin murmurar ni reproche los más dolorosos golpes, y entregaste todo por nuestra salvación, llegue hasta ti nuestra oración y nuestra petición.
Demonios y poseídos de ti huían por el poder de tu oración, levantaste enfermos de sus lechos, curaste a los ciegos de su ceguera, devolviste la salud a los leprosos, diste vida y pan a los que te seguían.
Multiplicaste los peces y los panes para dárselo a la multitud, abriste las aguas y por ellas caminaste, diste el día y la noche, la paz y la armonía, tú nuestro Juez Justo sin reparo acompañas a tu pueblo.
Sin limitaciones lo entregas todo y cumples con tu promesa, cuando un devoto a ti acude, no humillas ni traicionas, no ofendes ni lastimas.
Tú nos enseñas por medio de parábolas, dejas en una herencia eterna en las Sagradas Escrituras, escuchas nuestra oración y acudes a nuestro favor.
Amén.
Divino y Justo Juez, te rezamos un Padre Nuestro confiando en tu poder santo.